Esta actividad formativa del Festival Internacional de Cine Documental de Guía de Isora se hace itinerante para viajar por los colegios e institutos de Tenerife este curso
La curiosidad de los niños es un hecho cotidiano sorprendente siempre, pero llega a resultar chocante cuando responde a imágenes que muestran la realidad ajena y difícil de otros niños o de otros adolescentes. ¿Por qué la gente de ese país no usa preservativos? ¿Por qué comen ratones? ¿Se pudo comprar los zapatos? Son algunas de las preguntas que han realizado escolares tinerfeños en la sección EnseñanDoc durante la sexta edición del Festival Internacional de Cine Documental MiradasDoc, que se está celebrando hasta el próximo 5 de noviembre en Guía de Isora (Islas Canarias).
Un total de 1.200 alumnos de 20 centros educativos de toda Tenerife se convierten esta semana en participativos espectadores de cine de la realidad. Concretamente, de una selección de la serie de Televisión Española (TVE) Objetivos del Milenio, que han podido analizar y comprender gracias a la presencia en MiradasDoc de la directora general de la serie, la periodista Miryam Pedrero, y de la codirectora de uno de los documentales que se proyectarán, Clara Puig.
Esta semana el Auditorio de Guía de Isora se llena primero de murmullos, risas, comentarios y bromas de pequeños espectadores para dar paso a dudas espontáneas ante la verdad de las historias que les llegan desde la pantalla. Más acostumbrados a consumir cine de ficción, poner rostro infantil a los enfermos de Sida en África (Descalzos), corroborar que algunos adolescentes se ven obligados a trabajar para poder seguir estudiando en América Latina (X la incógnita de Abel), comprobar que el hambre es una fiera que se agazapa en una familia guatemalteca (Primero Dios) o descubrir cómo sufre la desigualdad una niña camboyana maltratada por su padre (El cuaderno de Srey Lin) despierta conciencias y forma espíritus críticos.
Los cuatro cortometrajes seleccionados para EnseñanDoc están elegidos según las edades de los estudiantes y cumplen con la premisa que se marcó el Festival, cuando, ya en su segunda edición, decidió ofrecer a las escuelas e institutos canarios la posibilidad de que sus alumnos disfruten de una programación específica con la intención de facilitarles su formación como ciudadanos. El cine documental se convierte así en un instrumento pedagógico para que los escolares se formen en valores como la tolerancia, la justicia social, la igualdad, los derechos humanos, la solidaridad, la participación y la dignidad. Ese objetivo parece cumplido en esta edición con la masiva participación de los niños y adolescentes, que, lejos de permanecer indiferentes ante crudeza de los relatos, han intervenido en los coloquios posteriores para, a través de sus dudas y expresiones, indagar más allá de lo que les ofrecía la pantalla. Una de las interrogantes que siempre se reitera se refiere a la suerte del protagonista. (¿Se compró los zapatos? ¿Su curó de la malnutrición?). El objetivo de que entiendan que se trata de historias reales está cumplido.
Programa itinerante
EnseñanDoc está este año de enhorabuena, puesto que, gracias a la colaboración del Cabildo de Tenerife, se convierte en un programa itinerante que recorrerá los centros de enseñanza de toda la Isla. Se cumple así una vieja aspiración del Festival, que, desde su primera edición, se plantea también formar y crear público que disfrute del cine documental y sepa leerlo.
En este sentido, el consejero de Educación, Juventud e Igualdad de Cabildo de Tenerife, Ángel Pérez Hernández, aseguró en Guía de Isora estar «muy satisfecho» con la colaboración de la corporación insular con la sección. «Desde que nos lo propuso el alcalde de Guía de Isora, Pedro Martín, nos pareció un programa muy interesante que permite educar en valores a los niños y jóvenes», y aseveró que, ante el interés demostrado por las escuelas e institutos, «el Cabildo se compromete a seguir apoyando esta iniciativa de MiradasDoc».
Por su parte, la teniente de alcalde y concejala del área de Cultura y Participación Ciudadana de Guía de Isora, Josefa Mesa, mostró su «satisfacción» por la excelente respuesta de los centros educativos, que este año han desbordado las previsiones, y resaltó que más de 6.200 estudiantes tinerfeños han acudido a las cinco últimas ediciones del Festival Internacional de Cine Documental.
Miryam Pedredo: «Es asombroso el público que asiste a este Festival»
La directora de la serie de Televisión Española (TVE), Miryam Pedrero, que demuestra estos días sus dotes pedagógicas ante un auditorio lleno de escolares, manifestó su asombro por el número de espectadores que acude a MiradasDoc. «En otros festivales de cine documental el público medio suele ser de apenas cinco personas por sala y aquí, sin embargo, es de 50», afirmó Pedrero, quien agradeció que se eligiera una selección de su serie Objetivos del Milenio para el programa formativo EnseñanDoc.
Respecto a su serie, Pedrero explicó que se gestó ante su necesidad como periodista de los informativos de Televisión Española «de contar noticias que muchas veces no tenían cabida» en los espacios dedicados a la actualidad. «Yo quería contar esas historias y me puse a ello, pero me ha costado mucho trabajo y mucho esfuerzo conseguir la financiación; hay que tener en cuenta que Objetivos del Milenio se ha rodado en muchas partes del mundo y, por tanto, es una serie ambiciosa que requiere un presupuesto adecuado».
Pedrero estuvo cinco años con el proyecto «bajo el brazo», recorriendo despachos hasta que finalmente logró financiación de la Agencia Española de Cooperación y Desarrollo. «Después me presenté en los despachos de los jefes de Televisión Española y entonces sí me dieron el visto bueno para seguir adelante», relató la directora. Tras mucho insistir, hizo realidad su proyecto y ahora, según dijo, con iniciativas como esta de MiradasDoc está llegando a un público adolescente, en formación, que toma conciencia.
Pedrero también recalcó que, tanto para ella como para su equipo, este trabajo ha representado todo un aprendizaje. «Observas cómo las personas somos capaces de tener espacios de felicidad», incluso en las peores circunstancias, y eso «nos ha enriquecido como personas». En la maleta de los viajes el equipo se trae el asombro por «la capacidad de superación y lucha de familias y niños que no tienen nada».